El inicio a una nueva Venezuela.
Durante la segunda década del siglo XX, Venezuela vive la transición de una sociedad agropecuaria con el café como producto principal de exportación, a una economía minera exportadora de petróleo, todavía caracterizada por una población rural, la cual vivía en los campos sometida al latifundio, al paludismo, la malaria, el hambre, el alfabetismo, con muy pocas escuelas y mucho menos universidades, solo dos la Universidad Central de Venezuela y la Universidad de Mérida, mientras que la del Zulia y la de Carabobo permanecían cerradas desde 1904. El país se encontraba gobernado con mano de hierro por Juan Vicente Gómez 1908-1935, una de las dictaduras más férreas del continente y de toda nuestra historia republicana. Pero la Caracas, de casi doscientos mil habitantes, en la cual trascurría su vida apacible a los pies de su eterno enamorado, el Ávila, la de los techos rojos, del tranvía, de paseos a los chorros y a la plaza Bolívar, ni siquiera percibe por un momento el acontecimiento más trascendental, que sus estudiantes están a punto de protagonizar y que determinaran el devenir de nuestra historia contemporánea.
Para 1928 los estudiantes ya contaban con la Federación Estudiantil de Venezuela FEV, fundada el 15 de marzo de 1927, la cual estaba presidida por un poeta, Jacinto Fombona Pachano, como primer presidente y como segundo presidente un estudiante de Derecho proveniente de Upata, Estado Bolívar, llamado Raúl Leoni Otero, ellos venían acompañados por una serie de bachilleres, todos dispuestos a organizar la FEV e impulsar sus luchas, se dedicaron a organizar conferencias, charlas, la edición de la revista Universidad y a construir la Casa de Bello, con la finalidad de hacer actos culturales, además de servir a los estudiantes como albergues, por tal motivo organizan una celebración para el mes de febrero, llamada "La Semana del Estudiante", correspondió a Raúl Leoni la coordinación de esas actividades, al sustituir a Jacinto Fombona en noviembre de 1927.
El 31 de enero de 1928 es elegida por los estudiantes su reina, Beatriz Peña, para presidir la fiesta de "La Semana del Estudiante", que está programada para dar comienzo el 6 de febrero de ese año, con una marcha a las 10 de la mañana, desde la Universidad hasta el Panteón Nacional, donde el Bachiller Jóvito Villalba pronuncia un discurso patriótico; en la Plaza la Pastora, se rindió un homenaje a José Félix Ribas con una ofrenda floral, por conmemorarse en esa semana la Batalla de la Victoria, en este acto Joaquin Gabaldón Márquez pronuncia un discurso y en la noche se realizó en el Teatro Municipal una celebración a Beatriz I, reina de los estudiantes, que incluyo actos musicales, discursos de Juan Bautista Oropeza, Jacinto Fombona Pachano y Pio Tamayo, el cual lee un poema aparentemente en homenaje a la reina, pero en realidad es ofrecido a su novia encadenada: La Libertad. Se cierra el evento con el Himno al Estudiante; el 8 se realizó un festival poético en que participan Miguel Otero Silva, Fernando Paz Castillo, Antonio Arriaz, Gonzalo Carnevali, el acto se clausura con un discurso de Rómulo Betancourt, el día 9 el rector de la Universidad es destituido del cargo y el sábado es nombrado Daniel Rodríguez Rivero como nuevo Rector, el domingo 12 fueron apresados los estudiantes de Derecho, Rómulo Betancourt, Joaquín Gabaldpn Márquez, Jóvito Villalba, por considerar las autoridades que pronunciaron discursos subversivos, al poeta Pio Tamayo, antiguo exilado político, por el poema alusivo a la Libertad y a Guillermo Prince Lara, estudiante de medicina, lo arrestan por romper una lápida conmemorativa a una obra de Gómez; son conducidos a la Rotunda.
Rómulo Betancourt, Joaquín Gabaldon Márquez, Jóvito VillalbaHasta el momento la reacción del gobierno es propia de una dictadura y para la apacible Caracas, sometida por la mano dura de Gómez, no es una reacción inesperada, sin embargo ocurre un acontecimiento que vendría hacer la primera sorpresa para los Caraqueños y es que el miércoles 22 enviaron los estudiantes un telegrama al Presidente de la Republica, exigiendo reducirlos a prisión, la mañana siguiente el centro de Caracas amanece cubierta con el texto del telegrama, en la noche el gobierno inicia los arrestos y los estudiantes se entregan masivamente, al final suman 214, los cuales son conducidos al Castillo de Puerto Cabello, donde permanecerán durante 12 días, como si fuera poco la sorpresa, se produce un acontecimiento aún más inesperado, la sociedad toda decide apoyar a sus estudiantes y comienza en Caracas protestas con cierre de comercios, de huelgas de tranvías, de choferes, también la ciudad de Mérida se solidariza, finalmente el gobierno decide soltar a los estudiantes y ponerlos en libertad.
Representa para Caracas una novedad la manera en que los estudiantes asumieron la defensa de sus derechos y la forma de luchar por sus ideales, ya no son las armas, ya no son los campos donde se definen las batallas, sino la ciudad con la palabra como única arma, también se utiliza por primera vez otro factor de trascendental importancia, la gente que sirve para el apoyo de las reivindicaciones, el respaldo de los caraqueños a sus estudiantes, con huelgas, protestas, cierre de comercios, jugó un papel determinante para doblegar al tirano en sus intenciones represivas, además, los estudiantes no se identificaron con el personalismo como era costumbre y se vinculan mas con la despersonalización, no se movilizan ya por una persona o se busca defender a un caudillo, lo que se persigue es la libertad, a través de un movimiento colectivo, llamado por los mismos estudiantes "Generación del 28". En definitiva lo que ocurrió esa semana, fue el nacimiento de una nueva manera de hacer política, que va a estar presente a lo largo del siglo XX, hasta nuestros días y permitirá a estos estudiante convertidos en políticos, implantar en 1959, por primera vez en Venezuela, un sistema democrático o lo más parecido a un sistema democrático, el cual venían luchando desde su vida de estudiante.